Fabio Schifano, jugador del KSCT Menen, sufrió la amputación de un dedo y daño en otros dos después de que un aficionado de su propio equipo lanzara fuegos artificiales al finalizar el partido contra el SK Zillebeke en la 4ª División Provincial C de Bélgica.
Al recoger el artefacto, creyendo que era inofensivo, explotó en su mano, causándole heridas graves. Esto ocurrió el día de su cumpleaños, justo después de anotar dos goles en la victoria de su equipo (4-0).
"Cuando el humo se disipó, vi que parte de mis dedos había desaparecido", relató Schifano a HLN, quien no olvidará su 26 aniversario. Lo que debería haber sido una celebración terminó en tragedia para él, su club y el fútbol, que una vez más muestra un rostro oscuro en las gradas.
El jugador recibió atención médica de inmediato debido a la gravedad de sus heridas, mientras abundante sangre cubría el campo durante su traslado urgente al hospital.
A pesar de las intervenciones, no pudieron salvar uno de sus dedos, que fue amputado.
La policía detuvo al responsable del lanzamiento del artefacto, un joven de 21 años sin vínculos con el club ni con el jugador afectado.